Estar a 1400 km de distancia de tu casa, de tu cama y de tus afectos, sin tener celular ni computadora y estando absolutamente solo, para darte cuenta cuales son las cosas necesarias para tu vida; para descubrir qué extrañás, en qué pensás; en fin, para volver a descubrirse a uno mismo..
No descubrí nada nuevo, sino que confirmé. Extraño y quiero lo mismo de siempre.
Pero que lindo fue estar dos días tranquilo, con la cabeza vacía.
El problema es esta ciudad. Acá hay mucho ruido, y con ruido no puedo relajarme.
No hay comentarios:
Publicar un comentario