Hace ya más de 5 meses escribía, en este mismo espacio, lo siguiente:
`` ¨Arte es crear¨, me dijo una de esas filósofas modernas que tienen el don de tener la razón muchas más veces que vos. Y yo prefiero crear mis propios paradigmas de vida, mis propias formas. Mis propios conceptos de búsqueda de felicidad. A veces es lindo tener una voz dulce que te aconseje que hacer, que camino seguir, que sendero tomar. Pero la verdad, soy de los que prefieren elegir usando mi subjetividad, y ganar o perder con mis herramientas.”
Me sorprendió más de lo que te imaginás volver a toparme con ese texto y sentir que, más de 150 días después, una nueva experiencia de vida me obligue a reabrir el debate interno entre: ``Lo que haría yo y lo que el resto me dice que haga´´. Por suerte, me puso feliz ver que soy consecuente y constante a lo largo del tiempo, por que tomé la misma decisión que aquel 26/9/2011.
Resulta sumamente complejo no verse inmerso en un egocentrismo que, sin lugar a dudas, resultaría totalmente perjudicial para cualquier ser humano. Uno jamás debería tentarse, caer y pecar con el famoso ``yo soy así, no intentes cambiarme´´. Creo que eso es un error gravísimo, que puede costar años remendar. Un sujeto, sin amigos, sin familia, sin voces que le aconsejen por que camino ir, que atajo tomar, que bifurcación elegir, probablemente tome pésimas decisiones a lo largo de su existencia.
Uno debe nutrirse día a día de las experiencias ajenas, de las historias de vida de su círculo íntimo. Uno, inevitablemente, debe escuchar y pensar muchísimo antes de creerse capaz de tomar una determinación vital para el subsistir de uno mismo. Sin embargo, sigo sosteniendo, que siempre va a pesar más las vivencias propias, el libro que uno está escribiendo en estos 21 años de hermosa vida. Al fin a cabo, y sin tanto palabrerío bonito y redundante, uno siempre debería confiar en su instinto. O mejor aún, en su corazón.
Si vos estás leyendo esto, escuchá lo siguiente y haceme caso, por que no soy de dar consejos muy seguido. ¿Hay un tema en particular que te perturbe, que no te permita sonreír todas las veces que quisieras?. Bueno, acóstate en tu cama, en tu posición preferida. Relajate, dejá que los pensamientos fluyan, que vayan y vengan. Respira mucho, y de un momento a otro, mágicamente, vas a encontrar dentro tuyo la respuesta, lo que tenés que hacer, los pasos a seguir para cumplir el objetivo que anhelás. Creéme. Adentro tuyo, está todo lo que necesitas.
La dejo acá. ``Nunca rompas el silencio si no es para mejorarlo´´. Será cuestión de acostarse, y meditar. Y encontrar la mejor manera de romper ese silencio que tanto lastima y duele.
